Ficha Título Zoe en horizontal Ficha por: Martin Hoar mayo 1, 2017 Autor @ZoeSwinger Editorial Suma Fecha de publicación 1 de diciembre de 2016 Review Completo Zoe en horizontal, ¿Es posible que, aunque el amor sea solo cosa de dos, el sexo pueda ser un juego en equipo? Aunque el amor solo sea cosa de dos, el sexo puede ser un juego que se realice en equipo. Mi nombre es Zoe, siempre me he considerado una chica normal, tengo una pareja, varios amigos, y un empleo, así que tengo una vida normal como la mayoría de las personas, o al menos así era hasta que una casualidad cambió por completo todo lo que ya era común. ¿Nunca te has dado cuenta de que todo lo que te decía que estaba mal, en realidad no lo estaba? ¿Te has puesto a pensar que es ser vertical y que es ser horizontal? ¿Te imaginas lo que se siente esconderte de todos para no ser juzgado? aunque tal vez la pregunta más importante es ¿sabes que es ser feliz por encima de todo y de todos? Ahora conocerás la historia de cómo llegué a otro nivel en el amor, te contaré la historia de cómo llegué a ser parte del mundo swinger.
Opinión personal de la novela Hoy os traigo la Reseña de 'Zoe en horizontal', un libro escrito por '@ZoeSwinger' y publicado por la editorial 'Suma de letras'. Esta historia está basada en hechos reales, pues la autora nos cuenta su propia historia, y nos relata en primera persona su paso por el mundo Swinger. Zoe es una chica normal, con una vida normal, con pareja y trabajo, hasta que un día descubre que su novio le pone los cuernos. Entonces decide dejarlo, sin pedirle explicaciones y seguir su vida alejada de él. Un día, en el metro, conoce a Marcos, con quien comparte una canción, en ese momento, se queda prendada de él e intenta buscarle, pero sin ningún éxito, hasta que un día en un concierto lo ve de nuevo y no duda en hablar con él. Mi compañero interpolero me sonríe y me dedica una mirada llena de solidaridad. Es una mirada profunda, calmada, que parece decirme: 'Yo te apoyo, estoy contigo'. O eso creo. A lo mejor piensa que estoy loca. Pero sigue sonriéndome, y nuestras manos se rozan sin querer por un segundo en el asiento.